En plena campaña electoral, Telerman presentó un nuevo plan para el tratamiento de la basura de la ciudad de Buenos Aires. Cuando se implemente, los vecinos de 31 barrios de Buenos Aires tendrán que tener dos bolsas diferentes en su casa: una para los llamados residuos sólidos (tela, papel, vidrio, plástico, cartón) y otra para los orgnánicos (que incluyen los restos de comida).
La idea es que el plan comience a funcionar en un mes cuando se coloquen 12.000 nuevos contenedores. Según anunciaron fuentes del gobierno de la ciudad, los residuos húmedos seguirán teniendo como destino final el relleno sanitario de José León Suárez. Y los secos se destinarán a los centros verdes, para que sean separados y vendidos como material reciclable.
Esperemos que esta vez el plan funcione y Buenos Aires tenga un plan inteligente y sostenible para tratar su basura.
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