Este post viene a cuento de numerosos comentarios y polémicas que observé en varios blogs, principalmente en el eBlog de Leandro Zanoni y en el Bloc de periodista de Darío Gallo, acerca del egocentrismo de los bloggers y la censura de comentarios.
Me parece que entrar a un blog y quejarse del narcisismo del autor es como ir a ver teatro de revista y criticar que las vedettes aparezcan con poca ropa. Aunque el blog en cuestión sea o intente ser periodístico, siempre tendrá la impronta del blogger que lo escribe. Es la naturaleza del medio y es necio negarla o pretender otra cosa.
En cuanto a la censura o moderación de comentarios -que no practico en mi blog- creo que es un derecho del autor, como el dueño de casa tiene derecho a no dejar fumar en su propiedad. Sin embargo, en este punto me gusta pensar en los comentarios como un juego de interacción con los lectores y, cuando son negativos, como un justo costo a pagar por la exposición pública –mínima o masiva- que implica tener un blog.
Ningún blogger (me incluyo) tiene la coherencia intelectual de Rodolfo Walsh como para creerse que no puede recibir comentarios desfavorables. Por otro lado, la mayoría de los críticos lo hacen desde el anonimato y de manera agresiva y no constructiva. En ese sentido, creo que esas críticas enaltecen y –aunque no tuve muchas de ese tipo- no veo necesario eliminarlas.
17 comentarios:
Guille,
Comparto -en parte- tu opinión, pero es un tema complejo. qué harías si tuvieras un post con 10 o 15 o 50 comentarios donde solo hay insultos hacia vos, pavadas, agresiones a terceros sin fundamentos ("Majul puto", etc) o cualquier otro tema que no tiene relación directa ni indirecta con el tema del post?
Es obvio que esos pocos anónimos (no son más de 3 o 4 nabos) espantan a la gente que tal vez quisiera comentar, pero se reprime porque no da poner un texto serio en medio de comentarios tontos o agresivos.
Es un tema largo. Los borrados se quejan de "censura" (cuando en realidad no es censura en el sentido estricto del término, ni siquiera buscan la palabra en el diccionario) pero ni siquiera dan su nombre o ponen un mail donde se los pueda contactar...
solo insultan y ponen el link a su blog para captar un par de visitas más.
TODOS los comentarios que borré tuvieron un motivo para ser borrados. No es la medida más simpatica ni la q más me gusta ni tampoco el objetivo de mi blog, pero es algo necesario para que el espacio no se convierta en un puterío y pierda nivel por ataques personales que ni siquiera son con valentía ni altura ni honestidad intelectual.
Creo que lo mejor, en estos casos, es borrarlos y a seguir posteando. uno no puede perder horas de su día con esta cuestión, mucho menos cuando no cobro por hacerlo.
Porque no se trata de borrar opiniones en contra (en mi blog está lleno de esas y siempre las dejo), sino de cuidar el espacio que yo cree para compartir con el que quiere, q por suerte son cada vez más.
un abrazo
PD: al final no quería hablar del tema, pero lo lograste! ja,
Qué tema. Claro, supongo que es complicado para quienes tienen muchos comentarios manejar a diario esta situación. Como lectora me pasa eso que comenta Leandro, que cuando hay muchos comments con insultos o que sólo sirven para distraer.. me aburro y no escribo nada.. Siento que pierdo el tiempo. Como blogger, no sé, sólo me pasó una vez que me hicieron críticas, con lo cual tampoco me sentí insultada o agraviada. No es lindo pero hay que bancárselas. Cada uno tiene derecho a comentar lo que quiera y uno como administrador de su blog a sacar lo que no le parezca pertinente. sls a ambos
Me gustó mucho y - algo demorado - este post fue tomado para ser publicado en BLOG COMPRIMIDO, la reseña de los weblogs locales.
Guillermo, es un tema interesante, ¿cómo manejar el feedback de lo que uno escribe?
¿Y cómo haran los chinos, que según Casciari tienen récords de 2500 comentarios diarios? Después dicen que es un país sin libertad de expresión.
En cuanto a ejemplos mucho más cercanos, justamente el de Hernán es uno de los blogs mejor regulados que conozco, casi nunca debe borrar comentarios, dándose charlas interesantísimas dentro de la ventanita de los lectores, algunas veces inspiradas en los post y otras totalmente tiradas de los pelos.
Por otra parte Podeti, en su blog de Clarín es una muestra de la restricción al lector/comentador, dejando esta nueva relación que nos regala este medio a un diálogo sólo con aquellos políticamente correctos (decisión que vaya uno a saber si es de Podeti mismo o de el grupo Clarín)
Y por último, un ejemplo que me atañe directamente, el caso de Marcelo Lacanna, que se perfilaba para ser uno de los sitios argentinos más frescos de la blogósfera, por no aceptar o saber manejar la interacción con sus lectores abandonó el proyecto, dejando sólo un blog habitado por sus lectores, los cuales directamente generaron un blog paralelo, los Salieris de Lacanna, más vivo el la misma fuente.
FE DE ERRATAS:
Donde dice "más vivo el la misma fuente" debe leerse "más vivo que la misma fuente".
Lalo: gracias por el comentario. Creo que debe ser muy molesto que te insulten y escriban críticas agresivas y sin mucho sentido todo el tiempo. En una situación así, quizás haría lo mismo. A mi no me pasó (tengo sólo 50 visitas por día) y aclaro que hablo desde ese lugar.
vb: me parece que por ahora estamos en la misma. Hay que ver qué hacemos si la cosa cambia.
blog comprimido: muchas gracias por citar el post en tu blog.
el bruche: muy bueno tu aporte. Me parece que en este tema nadie tiene la última palabra. Cada blogger tiene derecho a hacer lo que quiera y luego los lectores elegirán
Excelente post. El autor de un blog tiene derecho a ser narcisista, ególatra, objetivo, subjetivo y todo lo contrario. Por algo es su blog. La posibilidad de hacer comentarios es un agregado a la obra original, pero NO ES la obra original.
El blog como herramienta permite esa interacción, pero no la define.
Las críticas a los posts originales, que no buscan enriquecer la propuesta inicial, le crean la ficción de una contribución ("Está mal, pero te lo digo con onda, eh...", por ejemplo), pero en realidad no pasa de una insinuación.
Marcelo: muchas gracias por tus palabras!
usuario anónimo: las tuyas no están en sintonía con el manuel de estilo de Sin Serif. Intentá una crítica con altura que seguro queda registrada.
viste guille, que al décimo comentario ya tuviste que borrar uno...
la primera vez siempre duele, pero después te acostumbrás ;)
abrazo, Lalo
Lalo: tenés razón, siempre hay que escuchar la voz de la experiencia. Sin embargo, no descarto dejar otros insultos que aparezcan... todavía no tengo una postura fija respecto del tema.
Fe de erratas: en mi comentario anterior, donde dice manuel debería decir manual.
En mi (leve) defensa puedo decir un par de cosas:
1) Desde que empezó esto, ha habido solo unos cinco comentarios que no publiqué en el blog, con contenido claramente racista.
2) El resto han sido tijereteados porque contenían groserías, pero dejando entender a qué grosería se refería; o porque contenían burlas a la muerte de personas; o alusiones personales. Siempre explicitando la acción del tijereteo. Salvando esto, las críticas, muchas salvajes, no se censuran.
3) Muchos han sido censurados pero como parte del juego con la censora: se podrían haber publicado enteros sin ningún problema.
4) A diferencia de muchos blogs, la realidad de la censura está admitida desde el principio y puesta en el tapete diariamente, y no sencillamente ejercida. La contrapartida es que estoy convirtiendo una acción nefasta en algo "divertido"; no es a propósito, sino una deformación profesional. Supongo que me estaré ganando mi porción del Infierno por esto.
Bueno, iba a hacer un post sobre esto, pero buscando para discutirle a Podeti, encontre este post en Google, y adhiero (y ahora tendre que buscar otro tema, grrr).
(Me da cosa comentar despues de Podeti, porque ultimamente me la paso peleando con él por cualquier cosa)
El problema es el de la comunicación en general, creo yo.
Creo haber leido alguna vez que si los artistas (y en este caso, los autores de escritos mas o menos artisticos) conocieran cuál es la interpretacion promedio de sus escritos, dejarían de producir.
Por mi parte, en algunos pocos blogs participo, y siempre respetando la tónica del blog (mal que le pese a Podeti, je), pero no suelo dar la razón fácil:
"Si, macho, tenés la pura, es asi como decis, blablabla", ya que eso no dice nada.
Meramente, uno intercala tambien un poco de divergencia, por extrapolacion o por simple vision periférica, o porque interpreta mal (o porque es gracioso).
De todas maneras, estoy de acuerdo en que los comments de mal gusto es mejor podarlos (aunque nunca lo he hecho, en mi humildísimo blog).
Che, la pelea con Podeti es en joda, eh!
Aclaro porque quizá no queda clara...
El tipo me hace reir todos los dias, pero hemos descubierto que bajo presión mejora bastante. Hubo una epoca (reality Meninas, por ejemplo), bastante flojo.
Esto de la cosósfera es maravilloso, los dislates pueden llegar a tomar una dimensión insospechada, llevando sus límites mucho más allá de sus fuentes y extendiéndose cual metástasis a los rincones más distantes.
Ahora sólo me intriga saber dónde terminará todo esto.
Me parece que cada cual es esclavo de sus palabras, y no hay mejor manera de comprobarlo que por aca.
El que opina algo, por mas que sea una idiotez insultante y sinsentido, que le pese. Y aunque sea anonimo.
Es mucho mas efectivo dejar al tipo en evidencia antes que borrarlo y, a lo mejor, desprestigiar al autor de la entrada.
Creo que esta bueno el generar reaccion, y si por eso vienen las puteadas, bienvenidas sean. Es lo que hace Podeti, y nosotros nos enganchamos. Por mi parte el jueguito con la censora me parece una idea barbara.
Concluyendo: No estoy de acuerdo para nada con la censura de ningun tipo, a menos que sea tomada en joda. Me acuerdo que en un fotolog que yo tenia (Y que me cerraron) hubo una epoca en que agarraba los comentarios y los modificaba un poco con letras diferenciadas para convertir las bardeadas en elogios. Era un juego medio pelotudo, pero cuando los que comentaban entendieron, salió algo bastante piola.
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