Con una nueva victoria en tierras brasileñas por la Copa Libertadores, Boca sigue alimentando el mito de equipo que se agranda en las paradas difícil y con un espíritu copero sin parangón en el continente. Los mismos medios de Brasil destacaban antes del partido del miércoles pasado que el Cruzeiro enfentaría una escuadra con 80 títulos en la cancha, sumando los campeonatos ganados por cada jugador xeneize.
Como contracara, River parece empeñarse en mostrar su perfil de equipo sin alma, anodino y carente de respuestas anímicas en las citas importantes. La crisis institucional y la volencia descontrolada en el seno de su barra brava no hacen más que empeorar el marco de un club que parece navegar a la deriva entre fracaso y fracaso.
4 comentarios:
DE NADA BOSTERO
me parece que a aguilar le queda poco
Parecería que el apodo millonario se dio vuelta. Ahora es Boca quien posee una importante cartera para administrar su equipo. Lo trajo a Riquelme, lo retuvo a Palacio, vende a Gago y a Banega por muchos millones. Y claro las consecuencias están a la vista, el equipo parace invensible, hasta en el mismisimo Brasil.
Quien los para?
Buen laburo
y... como dijo crítica, boca siempre rima con copa
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